Rompiendo mitos alimentarios: lo que realmente piensa un experto sobre los alimentos "buenos" y "malos"
En el mundo de la nutrición, la abundancia de información disponible puede resultar a menudo contradictoria y confusa. Las tendencias dietéticas van y vienen, y con ellas la clasificación de determinados alimentos como “buenos” o “malos”. Pero ¿qué tan precisas son estas etiquetas? ¿Estos mitos alimentarios ayudan o dificultan nuestra comprensión de la alimentación saludable?
Descripción general de los mitos alimentarios comunes
Todavía existen muchos mitos en el mundo de la nutrición que regularmente conducen a confusión y a elecciones alimentarias equivocadas. Disipemos algunos de esos mitos nutricionales comunes para comprender mejor la verdad detrás de ellos.
- Mito: Los carbohidratos engordan
- Mito: todas las grasas son malas
- Mito: Saltarse comidas facilita la pérdida de peso
- Mito: los productos lácteos son la única fuente de calcio
- Mito: las dietas sin gluten son más saludables
- Mito: los alimentos frescos siempre son mejores que los congelados
- Mito: Las dietas detox son vitales para desechar toxinas
Realidad: Los carbohidratos por sí solos no causan aumento de peso. Los problemas surgen por el tipo de carbohidratos y su cantidad. Los cereales integrales y los carbohidratos complejos son esenciales para obtener energía y deben formar parte de una dieta equilibrada.
Realidad: No todas las grasas son iguales. Si bien las grasas trans y las grasas saturadas pueden ser perjudiciales, las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, incluidas las que se encuentran en los aguacates, las nueces y el pescado, son adecuadas para la salud del corazón.
Realidad: Saltarse comidas puede ralentizar el metabolismo y provocar que comas en exceso más adelante. Es mejor consumir una dieta equilibrada a intervalos regulares.
Realidad: Aunque los productos lácteos son ricos en calcio, existen otras fuentes, como vegetales de hojas verdes, almendras y leche vegetal fortificada.
Realidad: Las dietas sin gluten son fundamentales para los seres humanos con enfermedad celíaca o intolerancia al gluten. Sin embargo, para otros, es posible que no haya ningún beneficio para la salud demostrado al evitar el gluten.
Realidad: Las frutas y verduras congeladas pueden ser tan nutritivas como las frescas. A menudo se congelan en su punto máximo de madurez, manteniendo los nutrientes y minerales.
Realidad: el cuerpo tiene su propio y poderoso dispositivo de limpieza: el hígado y los riñones. Hay pocas pruebas científicas de que las dietas detox eliminen eficazmente las toxinas.
Por qué demonizar los alimentos no es beneficioso
En la cultura dietética actual, es común etiquetar ciertos alimentos como "buenos" o "malos", lo que lleva a un fenómeno conocido como demonización de las comidas. Sin embargo, este pensamiento en blanco y negro sobre las comidas puede ser más peligroso que útil. He aquí por qué demonizar la comida no es un método útil:
- Crea una relación poco saludable con la comida: Etiquetar las comidas como "buenas" o "malas" puede provocar sentimientos de culpa y vergüenza al comer, contribuyendo a una relación peligrosa con las comidas. Este tipo de pensamiento puede contribuir a los trastornos alimentarios y afectar negativamente a la salud mental.
- Simplifica demasiado la nutrición: la nutrición es complicada y multifacética. Demonizar ciertos alimentos simplifica demasiado esta complejidad e ignora la verdad de que los alimentos de todos podrían tener un lugar en una dieta equilibrada. Incluso los ingredientes que comúnmente pueden clasificarse como "no saludables" pueden consumirse con cuidado sin afectar significativamente la salud general.
- Ignore las necesidades nutricionales individuales: el cuerpo de cada persona es único y también lo son sus necesidades nutricionales. Lo que puede ser un alérgeno o un desencadenante para un individuo puede ser una opción nutricional para otro.
- Puede provocar deficiencias de nutrientes: evitar ciertos alimentos o grupos de alimentos por completo, creyendo que son inherentemente "malos", puede provocar deficiencias de nutrientes y una dieta desequilibrada. Por ejemplo, eliminar todas las grasas puede privar al cuerpo de los ácidos grasos esenciales necesarios para la salud del corazón y el cerebro. O debido a determinadas dietas, puede privar a su cuerpo de importantes vitaminas del grupo B, hierro, vitamina C. Por cierto, puede experimentar tinnitus con niveles bajos de hierro. Si notas que en tu dieta faltan vitaminas y minerales, Floradix Eisen + Vitamine es un complemento nutricional líquido de alta calidad diseñado para favorecer la hematopoyesis saludable, la energía y el bienestar general. Contiene hierro, vitaminas B1, B2, B6 y B12, además de vitamina C.
- Poco realista e insostenible: La demonización de ciertos alimentos conduce periódicamente a restricciones dietéticas excesivas que pueden resultar poco realistas e insostenibles a largo plazo. Esto puede provocar un ciclo de límite y de comer en exceso que es negativo para la salud tanto física como mental.
Una dieta desequilibrada conduce a una deficiencia de vitaminas, minerales y colágeno
Una dieta desequilibrada podría tener efectos de gran alcance en nuestra salud, siendo uno de los más graves las deficiencias de nutrientes esenciales, junto con vitaminas, minerales y colágeno. Descubramos cómo una dieta desequilibrada contribuye a esas carencias y su impacto.
- Deficiencia de vitaminas : las vitaminas desempeñan un papel importante en diversas funciones corporales, incluida la reacción inmunitaria, la producción de energía y el mantenimiento de la piel, los ojos y la función cerebral saludables. Una dieta desequilibrada que carece de frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras puede provocar deficiencias en nutrientes esenciales que incluyen vitaminas A, C, D y del complejo B. Esto puede provocar una serie de problemas de salud, que incluyen inmunidad debilitada, fatiga, mala visión y deterioro de las características cognitivas.
- Deficiencia de minerales : Los minerales que incluyen calcio, potasio, hierro y zinc son cruciales para la salud ósea, la función muscular, la formación de sangre y muchas reacciones enzimáticas. Una dieta desequilibrada suele carecer de esos minerales esenciales, lo que provoca problemas como osteoporosis, debilidad muscular, anemia y deterioro de la recuperación de heridas. Por ello, es muy importante incluir en la dieta vitaminas para las articulaciones y los tejidos musculares y vitaminas para las rodillas, y aportar a la dieta una cantidad suficiente de hierro, por ejemplo, junto con el complemento Phytopharma Ferrum Plus , que incorpora hierro, vitamina C, B12 y ácido fólico. El hierro es necesario para la formación y transporte de oxígeno en los tejidos para la producción de energía, reduciendo la fatiga y, en consecuencia, también es una excelente vitamina para la memoria y la salud del cerebro.
- Deficiencia de colágeno : el colágeno es una proteína clave que ofrece estructura y fuerza a la piel, los huesos, los músculos y los tejidos conectivos. Una dieta baja en proteínas, principalmente pobre en los aminoácidos necesarios para la síntesis de colágeno, puede provocar una disminución de la producción de colágeno. Esto puede manifestarse como problemas de la piel que consisten en arrugas y falta de elasticidad, dolor en las articulaciones y curación lenta de las lesiones. Le recomendamos que se interese por Vita Pro Collagen , un suplemento dietético con colágeno UC-II, ácido hialurónico, MSM, astaxantina, coenzima Q10, vitaminas y minerales. La vitamina C promueve la formación regular de colágeno para los cartílagos y las características de la piel todos los días. La biotina contribuye a la renovación del cabello y la piel normales. El manganeso contribuye a la formación diaria del tejido conectivo. El selenio contribuye al mantenimiento del cabello y las uñas en buen estado. El zinc contribuye al mantenimiento diario del cabello, las uñas y la piel.
Consecuencias de la deficiencia de nutrientes
- Salud de la piel y el cabello: Las deficiencias de vitaminas, minerales y colágeno pueden provocar problemas en la piel que incluyen sequedad, envejecimiento prematuro y caída del cabello.
- Salud de los huesos y las articulaciones: la falta de calcio, vitamina D y colágeno puede debilitar los huesos y las articulaciones, aumentando el riesgo de fracturas y osteoartritis.
- Sistema inmunológico débil: el consumo inadecuado de vitaminas y minerales puede debilitar el sistema inmunológico, haciendo que el cuerpo sea más susceptible a infecciones y enfermedades.
- Salud negativa en general: con el tiempo, una dieta baja en nutrientes puede provocar enfermedades continuas, como enfermedades cardíacas, diabetes y deterioro cognitivo.
Para salvar estas deficiencias, es fundamental consumir una dieta equilibrada que incluya muchas vitaminas. Esto incluye muchas frutas y verduras, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables. Se pueden considerar los suplementos dietéticos para las personas que no pueden satisfacer sus necesidades dietéticas únicamente con la dieta; sin embargo, es excelente consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier rutina de suplementos.
Resumiendo el estudio de los mitos alimentarios, quedará claro que la nutrición no es algo blanco y negro. Una dieta equilibrada, moderación y comprensión del valor nutricional y los efectos sobre la salud de los diferentes alimentos son fundamentales. El enfoque de nutrición más sostenible y saludable implica una dieta variada y rica en nutrientes adaptada a los deseos y elecciones de la persona. Es fundamental romper con mitos y conceptos erróneos y elegir alimentos con conocimiento de causa y basándose en la ciencia y los objetivos de salud personal.
Descargo de responsabilidad: este artículo contiene información general sobre mitos alimentarios comunes y no pretende brindar asesoramiento, diagnóstico o tratamiento médico. Las necesidades nutricionales individuales pueden variar mucho, por lo que se recomienda consultar a un dietista registrado o a un profesional de la salud para obtener asesoramiento dietético individualizado.
S. Lindström